¿Y qué podía hacer? ¿Acusarlo de hacer trampas mejor que yo?

Doyle Lonnegan en El Golpe.

Que aquí nos gusta el Splendor es algo que ya se sabe (de hecho ya hicimos otra tira con este juegazo), pero el Splendor tiene un peligro que comparte con otros juegos, que es uno de esos juegos en que te sientes tan absorto por tus cartas y tus fichas que a veces no te fijas mucho en el de los demás y te la acaban clavando.

Y sí, el sobrino #1 intentó colármela. Si es que ni de la familia te puedes fiar.

Y ya que estamos con juegos de mesa me gustaría dedicar esta tira a mi consejero de cabecera en todo lo referente a ellos, el gran Rafa Bone, el tío que más sabe de esto y que tan bien me ha asesorado tantas y tantas veces. De hecho sabe tanto que tiene una tienda de juegos, Homo Ludicus Salamanca, que sí, que vende juegos y eso que a mí ya me parece bien, pero además tiene cómics de El Sistema D13 firmados y dedicados con un dibujito… Vamos, más razones para ir a darle la brasa ya no os puedo dar.